El Espíritu de la Oración

Si el espíritu de la oración no está en el pueblo,  el ministro puede predicar como un ángel, pero no puede esperar el éxito. Si no está el espíritu de oración en una iglesia puede haber riqueza, puede haber talento, puede haber cierto grado de esfuerzo, puede haber una gran infraestructura, pero el Señor no está allí. Que los hombres oren es una prueba tan segura de la presencia de Dios, como la subida del termómetro es una evidencia del aumento de la temperatura. Al medir el Nilómetro  la subida de las aguas en el Nilo, también predice la cantidad de la cosecha en Egipto. Así, la reunión de oración es una gracia-mómetro, y a partir de ella podemos juzgar el tamaño de la obra divina en un pueblo. Si Dios está cerca de una iglesia, ésta debe orar, y si El no está allí, una de las primeras muestras de su ausencia será la pereza en la oración.
Charles Spurgeon