La Salvación

25 Razones por las que no se pierde la salvación.

 1. Porque el cristiano está sellado con el Espíritu Santo para el día de la redención - Efesios 1:13-14 

2. Porque nadie lo puede arrebatar de la mano de Cristo - Juan 10:28

3. Porque nadie lo puede arrebatar de la mano del Padre - Juan 10:29

4. Porque la vida obtenida en el nuevo nacimiento es de Dios, y por tanto, ya no puede morir - Juan 3:3,5; Romanos 6:9-11

5. La salvación se obtiene por fe, no por obras, y se conserva de la misma manera, por la fe - Efesios 2:8-9; Colosenses 2:6

6. La salvación es un regalo de Dios, y nadie que da un regalo lo vuelve a quitar; y por supuesto, Dios menos - Romanos 6:23

7. Cristo nunca rechazará a los que ha recibido - Juan 6:37

8. Porque se invalidaría el bautismo, ya que el bautismo es para creyentes - Mateo 28:19

9. Si el cristiano pudiera perder su salvación, entonces debería poder ser salvo otra vez; lo cual es imposible, porque sería como volver a crucificar a Cristo - Hebreos 6:6

10. Cristo murió por todos los pecados, no solamente por aquellos cometidos hasta antes de ser salvo - Colosenses 2:13-14

11. Nada nos puede separar del amor de Dios - Romanos 8:35-39

12. Cuando se acepta a Cristo, la Trinidad viene a hacer morada en el creyente para siempre; no entran y salen del creyente por su comportamiento - Juan 14:17-18,23

13. El creyente verdadero tiene (no tendrá) vida eterna; no vida nada más mientras sea “fiel” - Juan 5:24

14. Ya que todos los pecados son iguales para Dios, y no existen los pecados “grandes” y “pequeños”; si se perdiera la salvación por el pecado, ésta se perdería a cada momento por causa de cada mentira, o mal pensamiento, etc. - Romanos 3:23 “La paga del pecado [todo pecado] es muerte. . .”

15. Si la salvación se pierde por “volver al pecado”, se crea incertidumbre porque ¿en qué momento se consideraría que una persona ha perdido su salvación? ¿con cuántos pecados? y si “regresa”, ¿tiene que volver a “aceptar” a Cristo, o basta con simplemente pedir perdón?

16. La salvación no se pierde porque Cristo prometió un lugar junto a Él en el cielo, y cada lugar está preparado para un cristiano específico, y no solamente para “cualquiera” que se mantenga “fiel”. - Juan 14:3

17. Los nombres de los salvos están escritos en el libro de la vida desde antes de la fundación del mundo, y Dios no los está quitando y poniendo según su comportamiento - Apocalipsis 3:5.

18. La sangre de Cristo limpia de TODO pecado (los pecados de toda la vida) - 1 Juan 1:9

19. Cuando Cristo murió, murió por todos los pecados, aun aquellos que el cristiano cometería en su vida de cristiano - 1 Pedro 2:24

20. El cristiano se convierte en hijo de Dios al aceptar a Cristo; un hijo de Dios no puede perderse - Juan 1:12.

21. El pecado interrumpe la comunión con el Padre, pero no la relación; así como la desobediencia de un hijo aquí en la tierra no termina su relación con su padre - Salmo 51:12 (note que David pidió de nuevo el gozo de su salvación, no su salvación).

22. El castigo de Dios a sus hijos por el pecado, no es quitándoles la salvación, sino disciplina paternal - Hebreos 12:5-7.

23. Al aceptar a Cristo somos hijos de Dios y coherederos con Cristo. Cristo es nuestro hermano mayor. Ni tal participación en la herencia, ni la relación con el Hermano mayor se interrumpen jamás; por ningún motivo - Romanos 8:17.

24. Porque invalidaría la obra intercesora de Cristo. Si el cristiano se puede perder, entonces Cristo no es un buen abogado - 1 Juan 2:1.

25. Porque entonces Dios no sería omnipotente, pues no sería poderoso para guardarnos sin caída – 2 Timoteo 1:12; Judas 24.

          
La verdad acerca de "La Salvación"

Jesús menciona la palabra "salvación" una sola vez (Lc. 19:9), pero sí usa muchas veces la palabra "salvar", para indicar en primer lugar, lo que vino a hacer (Lc. 4:18; Mt. 18:11; 20:28), y en segundo lugar, lo que se le exige al hombre (Mr. 8:35; Lc. 7:50; 8:12; 13:24; Mt. 10:22) Lc. 18:26, y el contexto, muestra que la salvación exige, un corazón humillado, la sencillez de un niño, la disposición a recibir, y la renuncia a todas las cosas por amor a Cristo, condiciones todas, que el hombre no puede cumplir por sí solo.

El apóstol Pablo deja bien claro el concepto de que no hay salvación alguna por medio de la ley ( Ro. 3:19-20 ), portarse bien y cumplir la ley, no salva, la salvación es por la Fe en Cristo ( Ro. 5:1 ), y no por obras como dice Ef. 2:9. Dios, por amor a Cristo, justifica al pecador, perdona su pecado, lo reconcilia consigo mismo en y mediante Cristo, "haciendo la paz mediante la sangre de su cruz" (2 Co. 5:18; Ro. 5:11 ), lo adopta como miembro de su familia ( Gal 4:5; Ef 1:13; 2 Co. 1:22 ), haciendo de él una nueva persona, ya que pasa a ser un Hijo de Dios, vuelve a nacer, y ya nunca más podrá dejar de ser hijo ( Lc. 15: 11-32)